Reflexiones acerca del incomprensible amor de Dios hacia nosotros.
¿Has hecho una locura alguna vez? Piensa un momento. En general, las personas tratan de controlarse y no hacen cosas “extrañas” en su vida. Los que hacen las así llamadas “locuras” son los niños y los adolescentes enamorados. Sin ir más lejos, cuando era pequeño pensé que podía volar y me subí a un muro en mi casa. Me puse una capa como Superman y me arrojé al vacío. Fue una locura, porque me fracturé el brazo derecho. ¿Has intentado esto?
Luego, cuando fui joven, cometí la locura de enamorarme de la niña más linda de la iglesia. Y tú, ¿ya recordaste qué locura has hecho en tu vida? Hoy te quiero mostrar las locuras más grandes de la historia; locuras que no tienen explicación posible. Las tres “locuras” que cometió Jesús:
- Amarnos incomprensiblemente.
- Tener humildad, siendo el Rey del Universo.
- Volver por nosotros, a pesar de todo.
Sabemos que la locura es una acción irrazonable que alguien ejecuta. Lo que Jesús hizo por nosotros era irracional para la humanidad, y ni siquiera los ángeles alcanzaban a entender en su máxima profundidad el plan de salvación. Era algo demasiado radical entregar su vida por la humanidad, pero el amor ¿es algo que se pueda entender racionalmente?
El amor de Jesús es incomprensible hasta hoy. Él te ama a pesar de todo lo que eres, a pesar de que estés tan lejos que nadie puede hallarte. Ahí está el amor de Jesús: en tu soledad, en tu dolor, en tus problemas de autoestima… siempre está el amor de Dios abrazándote y dándote esperanza.
Querido joven, Jesús te ama con locura; y quizás en este momento no te sientas amado por nadie. Déjame decirte que Jesús te ama en el momento en que estás. Su amor no está condicionado a que tú lo ames, no es un amor egoísta. El amor de Jesús es incondicional y eterno hacia ti; y eso nadie te lo podrá quitar jamás.
Jesús, siendo el Rey del Universo, demostró humildad al venir a esta Tierra, que es su Creación. Se hizo hombre por nosotros para morir y reconectar al Padre con sus hijos. En su amor, Jesús –a pesar de que lo traicionaron, vendieron su amistad y lo clavaron en la cruz– quiere volver a buscarte. Es una locura realmente que alguien quiera volver al lugar donde le hicieron tanto daño. Yo mismo doy ese consejo en terapia: “No vuelvas allí si te lastimaron”. Sin embargo, Jesús nos enseña que lo que es locura para el mundo es amor para él.
Te propongo algunas “locuras” para este año 2022:
- Comienza el día madrugando y haciendo tu culto personal.
- Cada día, habla a cuatro personas de Jesús.
- Dedica, al menos, el 70 % de tus redes sociales a mostrar a Jesús y hablar de lo que él ha hecho en tu vida
- Prepara una semana de oración digital para tus amigos.
- Prepara un grupo de WhatsApp de oración intercesora.
2022 debe ser el año de hacer locuras por Jesús. Te invito a que no te conformes con lo que estás haciendo, ni con lo que eres. Deja que el amor y las locuras que Cristo hizo sean un faro para tu vida.
Escríbeme sobre cuáles serán tus cinco “locuras” por Jesús este año 2022.
Muy buena reflexión. Me ha encantado.
Gracias al amor incondicional de Dios, el cual nos impele a retornar a los brazos de Jesús, a retomar el camino. Gracias Señor Jesús por venir a esta ingrato mundo y prometernos que retornarás por los tuyos.