por Carolina Ramos Pruzzo | Ago 2, 2018 | Opinión
Tenía cuatro años, y quería leer esos libros que se amontonaban en mi mesita de luz. Veía la biblioteca de casa repleta, y ya me aburría entender solamente las palabras sueltas en los carteles de la calle que mi mamá con tanta paciencia me ayudaba a deletrear. Jugaba...